Automatización industrial: qué es y aplicaciones

Contar con un sistema de automatización industrial eficiente y personalizado es vital para cualquier empresa que quiera mejorar y optimizar sus procesos productivos a día de hoy.

Mejorar la calidad de los productos que se fabrican reduciendo a la vez los costes y el tiempo que se emplea en realizarlos no solo es posible, sino que aplicando la tecnología adecuada de automatización industrial es muy sencillo, ¡y además sale tremendamente rentable!

La automatización industrial es el uso de elementos tecnológicos con el objetivo de llevar a cabo tareas y procesos de manera autónoma en una fábrica o en cualquier planta de producción.

Por tanto, la automatización industrial en empresas consiste en la utilización de equipos y sistemas automatizados para mejorar aspectos como la eficiencia, la calidad o la seguridad en los métodos de producción industrial.

Los muchos beneficios de la automatización industrial permiten que pueda aplicarse a diferentes áreas de la producción, como pueden ser el ensamblaje, la soldadura, la pintura, el almacenamiento o incluso las exigentes tareas de inspección. Además, el montaje y mantenimiento de sistemas de automatización industrial puede desarrollarse en diferentes tipos de industrias, como la automotriz, la alimentaria, la farmacéutica o la electrónica, por citar algunas.

Entre los principales objetivos de la automatización industrial están los siguientes:

• Reducción de costes.
• Disminución de errores humanos que tanto lastran determinadas decisiones.
• Aumento de la velocidad en los procesos industriales.
• Mayor precisión en la producción.

También se ven afectados muy positivamente aspectos como la seguridad laboral, y posibilitan monitorizar y controlar los procesos de producción en tiempo real, lo que permite tomar decisiones más inteligentes y acertadas en vivo y en directo.

Ahora bien, la implementación de un sistema de automatización industrial requiere de una planificación cuidadosa, de una inversión inicial considerable y del desarrollo de habilidades y conocimientos especializados por parte de los trabajadores involucrados en él.

Tras eso será necesario realizar tareas de mantenimiento y labores de formación continua, pero los beneficios superarán con creces cualquier tipo de coste derivado de este tipo de actividades imprescindibles.

Existen distintas clases de sistemas de automatización industrial, aunque estos son los principales a tener en cuenta:

• Sistemas de control numérico (CNC): utilizan software especializado y maquinaria que se controlan a través de ordenadores para fabricar piezas con precisión y la recurrencia que sea necesaria. Los sistemas CNC suelen ser los elegidos en la fabricación de componentes mecánicos y en la industria del mecanizado.
• Sistemas de control de procesos: son los mejores a la hora de controlar procesos industriales tan habituales y a la vez críticos como la temperatura, la presión, el flujo o el nivel de calidad de los productos. Estos sistemas automatizados de control de procesos son comunes en la industria química y alimentaria.
• Sistemas de control de robots: si hay robótica de por medio, estos sistemas son los más indicados para automatizar procesos de fabricación como la soldadura, el ensamblaje y el embalaje. Es común encontrar un sistema de automatización industrial como este en las industrias automotriz y electrónica.

En un mundo en el que la industria 4.0 marca el listón, integrar tecnologías como estas en los procesos productivos resulta determinante para cumplir objetivos sin dejar de lado el crecimiento exponencial de cualquier tipo de industria.

La automatización industrial permite la conexión y el intercambio de datos entre máquinas y sistemas sin necesidad de intervención humana, pudiendo además recabar datos, analizarlos y, enlazada a las herramientas de inteligencia artificial más apropiadas, incluso tomar decisiones eficientes.

Los servicios de automatización industrial son cada vez más imprescindibles para empresas que quieren mejorar la eficiencia de sus procesos productivos, reducir costes y aumentar la productividad todo lo posible. Estos servicios ofrecen soluciones totalmente personalizadas de automatización, lo que permite mayor precisión y velocidad en la producción, así como llevar una mejor supervisión y control de los procesos.

Dicha automatización también reduce los errores humanos y los accidentes laborales, lo que mejora la seguridad en el lugar de trabajo. Por eso es tan importante contar con la mejor solución de ERP para industria posible, un sistema todo en uno con el que poder garantizar un control total tanto de las finanzas como de las ventas, los servicios y las operaciones, que permita una máxima organización sin tener que saltar entre varias herramientas de trabajo.